La competencia en el mundo empresarial es inevitable y, en muchos sentidos, es la fuerza impulsora que promueve la innovación, el crecimiento y la mejora continua. Sin embargo, cuando se vuelve desleal, conlleva consecuencias perjudiciales no solo para las empresas involucradas, sino también para el mercado en su conjunto. Por ello, la integridad empresarial juega un papel crucial en la prevención de prácticas desleales y en el fomento de un entorno comercial justo y ético....