Los algoritmos han cambiado nuestra vida en la última década y continuarán alterando drásticamente la forma en la que vivimos y trabajamos. Nos estamos acostumbrando a que respondan nuestras preguntas antes de que las hagamos y a que nuestras necesidades y deseos se aborden con recomendaciones que ni siquiera pedimos. Por ejemplo, lo primero que solemos hacer cuando llegamos a otra ciudad es abrir una aplicación en el teléfono móvil que nos sugiera en dónde comer. En...