Sin ética no existe confianza de los trabajadores, consumidores, clientes, proveedores y/o cualquier persona, ya sea pública o privada, hacia las empresas con las que necesitan o desean entablar relaciones duraderas y sostenibles. Múltiples ejemplos de casos corporativos se han basado principalmente por la nula o poca ética empresarial de las compañías que conllevan consecuencias económicas, reputacionales, penales y sancionatorias, entre otras.
Cada vez más se presenta en el mundo la necesidad de implementar un sistema que recopile todos los elementos necesarios para establecer, desarrollar, mantener y ejecutar las acciones que detecten, prevengan y corrijan los riesgos a los que las corporaciones se encuentran expuestas, especialmente en temas éticos. Esto es a lo que actualmente se le denomina sistema de Compliance.
Los retos para el desarrollo de un sistema de Compliance sólido y duradero son múltiples y variados, y dependen del tamaño de la empresa, sector, negocio, rubro, etc. Por ello, se afirma que los sistemas de Compliance son trajes a la medida. No obstante, existen cinco elementos fundamentales para su desarrollo: 1. Liderazgo (Tone of the Top), 2. Función de Cumplimiento, 3. Gestión de Riesgos, 4. Herramientas de cumplimiento y 5. Monitoreo y supervisión.
Nestlé, con más de 150 años de existencia y 80 en el país, trabaja para desarrollar todo el poder de la alimentación para mejorar la calidad de vida hoy y para las futuras generaciones. Actúa por medio de su modelo de Creación de Valor Compartido, el cual busca crear valor no solo para sus accionistas, sino para las personas, comunidades y medio ambiente. Nestlé ha desarrollado, desde sus inicios, un sistema de Compliance que engloba los cinco elementos descritos anteriormente bajo una única directriz global que impacta el negocio en cada uno de los países en donde opera.
Los retos para el desarrollo de un sistema de Compliance sólido y duradero son múltiples y variados”.
Con el fin de unificar y consolidar sus herramientas de cumplimiento, Nestlé ha proporcionado un marco ético, sólido y único por medio de sus Principios Corporativos Empresariales y el Código de Conducta Empresarial que aplica en forma transversal y global.
Los Principios Corporativos Empresariales de Nestlé se desarrollan a partir de seis ejes: consumidores, su gente, cadena de valor, integridad comercial, interacción y comunicación transparente y cumplimiento. Dentro de cada eje existen temas prioritarios de observancia general, como nutrición, salud y bienestar, respeto de los derechos humanos, diversidad e inclusión y abastecimiento responsable, entre otros.
Por su cuenta, el Código de Conducta Empresarial de Nestlé busca desarrollar más detalladamente sus Principios Corporativos Empresariales y contribuir a implementarlos en forma continua a través del establecimiento de ciertas normas mínimas de comportamiento no negociables. Por tal razón se desarrollan temáticas como conflicto de interés, oportunidades corporativas, defensa de la competencia y legalidad comercial, información confidencial, soborno y corrupción, discriminación y acoso, y comunicación de conductas ilegales, entre otros.
Es importante mencionar que el mensaje de liderazgo en la aplicación del marco ético es la realización de negocios basados en estos principios. Incluso en ausencia de normativas legales o regulatorias, cuando los principios y políticas internas son más restrictivos que las legislaciones locales, se aplica el estándar más alto.
La generación de negocios éticos es una exigencia global que crea confianza con los actores internos y externos de cualquier compañía”.
Nestlé tiene un plan anual estratégico de comunicación y entrenamiento de los tópicos más relevantes de ética empresarial a todos sus colaboradores, logrando de esta forma que desde que el colaborador inicia su relación laboral, conozca y desempeñe sus funciones basado en cumplimiento.
Otro factor importante de generación de cultura de cumplimiento corporativa se deriva del Tone of the Top de la compañía, en el que a partir del ejemplo de los directores, accionistas, ejecutivos, administradores y líderes en general, se permea en todos los niveles la exigencia de cumplimiento. Existe también un canal de denuncia independiente que garantiza la confidencialidad al denunciar cualquier práctica fuera de cumplimiento, el cual puede ser utilizado por colaboradores y/o cualquier externo para su inmediata investigación y tratamiento.
En conclusión, la generación de negocios éticos es una exigencia global que crea confianza con los actores internos y externos de cualquier compañía. Para lograr realmente que la ética empresarial sea parte de la cultura organizacional, es necesario crear un sistema de Compliance que responda las necesidades específicas de la compañía, basado en los riesgos de esta y considerando los cinco aspectos fundamentales descritos anteriormente. Es necesario recordar que el actuar de las empresas se realiza por medio de seres humanos, sujetos a errores, y es poco creíble pensar que se evitarán completamente los eventos fuera de cumplimiento. Lo importante es estar preparado para anticipar y responder en consecuencia de la ética empresarial que la compañía comunica.
Por: Equipo legal de Nestlé Guatemala