La facilitación del comercio es elemental para el desarrollo económico de un país. Sin embargo, en Guatemala el comercio se ve afectado por procesos anticuados que dificultan llevar a cabo los negocios con agilidad y efectividad, y obtener mejores beneficios. La burocracia estatal es una de las principales causas que limitan la actividad económica, ya que retrasa, obstaculiza y complica las diligencias necesarias para operar efectivamente dentro del ámbito comercial. Por esta razón, es de suma importancia que todos los actores involucrados en el comercio busquen vías efectivas para facilitarlo.
La Organización Mundial del Comercio (OMC) define la facilitación del comercio como un mecanismo de “simplificación, modernización y armonización de los procesos de importación y exportación”. Lo que se busca es la reducción del costo del comercio transfronterizo, en donde cualquier producto pueda llegar a su destino sin mayores obstáculos para ingresar en el mercado. Muchos países adscritos a la OMC han tomado acción para agilizar el comercio a nivel global.
En 2017, los miembros de la OMC negociaron el Acuerdo sobre Facilitación del Comercio (AFC) que ha servido para el movimiento ágil de mercancías. A raíz de este acuerdo es que ha existido mayor cooperación por parte de las autoridades aduaneras al facilitar la entrada de productos comerciales en los países. Este tipo de acciones son necesarias para la modernización del intercambio de productos a nivel mundial, por lo que es necesario continuar con esta tendencia en regiones tan importantes como Centroamérica.
La burocracia estatal es una de las principales causas que limitan la actividad económica”.
Además de la burocracia engorrosa, se necesita de una infraestructura física dentro de las aduanas y un mejoramiento de las vías de ingreso y despacho de productos. Los puertos deben gozar de infraestructura vial de calidad para la posterior distribución de mercancías. A su vez, la infraestructura física de los puertos debe ser de primer nivel para satisfacer la demanda en los plazos de tiempo establecidos, evitando así, costos imprevistos y problemas de logística. Esto también es un requisito importante para que los procesos de cooperación en aduanas continúen y se mejoren en la región.
La cooperación aduanera es otro paso que muchos países han dado que debe continuar. Países del Triángulo Norte de Centroamérica ya comenzaron a establecer uniones aduaneras, sumándose a estas estrategias que agilizan el comercio a nivel regional. Esto beneficia a las empresas que comercian y las relaciones entre los países que firman este tipo de acuerdos, volviéndolos más atractivos para atraer inversión.
Guatemala es uno de los países que debe trabajar seriamente para modernizar la actividad comercial, por lo que también debe centralizar la información y los trámites para gestionar las importaciones y exportaciones. Al mismo tiempo, debe modernizar los canales, girando sus actividades hacia el mundo digital. Esto se hace eliminando ciertos procesos engorrosos que le quitan tiempo a las personas que comercian. La actividad portuaria debe modernizarse y ser más accesible para los usuarios.
El modelo de facilitación del comercio es la vía correcta, por lo que se debe continuar con el esfuerzo”.
La facilitación del comercio debe ser una de las prioridades tanto para Guatemala como para la región. En los últimos años se han trabajado acuerdos y estrategias importantes a nivel global para la simplificación y armonización del comercio a nivel global que deben continuar su curso en Guatemala, contribuyendo así a la modernización y el fortalecimiento de los puertos. Estas medidas traerán mayor cooperación entre los países de la región y volverá al país, un foco de inversión importante. El modelo de facilitación del comercio es la vía correcta, por lo que se debe continuar con el esfuerzo.
Por: Gonzalo Cabrera | Analista político de la Dirección de Análisis Estratégico de Cámara de Industria de Guatemala (CIG)