Los sistemas de gestión de seguridad y salud ocupacional tienen como objetivo promover la seguridad y la salud de las personas mediante la prevención y el control de riesgos, así como la mejora continua.
En ese tema Ternium es uno de los líderes de la industria porque se esfuerza en poner muy alta la vara. Máximo Vedoya, CEO de la empresa, declaró a la política de seguridad y salud ocupacional como un valor primordial y urgió a integrarla en todos los procesos para alcanzar un desarrollo sustentable en las operaciones.
Desde entonces se ha trabajado para establecer una cultura en la que cada persona tiene un rol activo para garantizar el bienestar del otro, tanto de los colaboradores, como de clientes, contratistas, proveedores y de las comunidades donde la compañía opera. Los mandos, como principales responsables de la seguridad y salud ocupacional, empoderan a sus subordinados para que puedan identificar factores de riesgo e implementar las medidas necesarias para accionar tomando el control. “Estamos cambiando la cultura organizacional, generando una nueva visión de seguridad en todo Ternium y estamos trabajando con gerencias, jefaturas y a nivel de operadores”, dice Guillermo Zamora, gerente de Operaciones y Transformados en Ternium.
La empresa proporciona los medios y recursos para que las actividades sean ejecutadas de manera segura, apuntando a preservar la integridad física y la salud del personal”.
La empresa proporciona los medios y recursos para que las actividades sean ejecutadas de manera segura, apuntando a preservar la integridad física y la salud del personal. “El enfoque de Ternium es que nada se antepone a la seguridad”, asegura Pride Alvizures, gerente de Seguridad Industrial e Higiene de Ternium Centroamérica, para explicar cómo en la política interna se considera que ninguna situación de emergencia, producción o resultados justifican la desatención de la seguridad o salud ocupacional.
También el sistema de seguridad y salud ocupacional es respaldado con capacitación: inducción al personal nuevo y charlas de actualización para los trabajadores con más tiempo en la empresa. “Hagamos la analogía, pensemos en una persona de 47 años y en otra de 17. La primera, quizá cuando maneje un auto le cueste recordar ponerse el cinturón, porque creció sin hacerlo; en cambio, el adolescente usó sillitas de seguridad, entonces para él, ponerse el cinturón de seguridad, será algo que haga en automático”, puntualizó Zamora.
Todo ese esfuerzo dio sus frutos durante la pandemia, pues debido a que la empresa había implementado proactivamente una serie de medidas de prevención y control para proteger a sus colaboradores, cuando se desató la crisis por el COVID-19, la reacción fue ágil en la adaptación de los protocolos que evitaron un mayor riesgo de contagio y aseguraron la continuidad de la operación.
Por: Ternium