Los Cebollines, un emblemático restaurante de comida mexicana, cumple 40 años de existencia. Han llegado a la madurez de marca que los convierte en un referente de su categoría, en un mercado que ha crecido exponencialmente en cuanto a la propuesta gastronómica. Aunque siente la responsabilidad del profesionalismo demostrado, sigue siendo una marca joven que busca continuar aprendiendo, innovando y creciendo. Fiel a su esencia conceptual: “La meritita comida mexicana”, es un ejemplo de constancia, disciplina mercadológica y creatividad.
El restaurante nació en 1983, en la Plazuela España de la Ciudad de Guatemala, con un tanto de aventura culinaria y otro tanto de olfato e intuición comercial. La idea no era solo vender comida, sino que también aportarle al mercado local algo diferente. Han sido los primeros en celebrar cada cumpleaños de un cliente con sombrero de charro, cantando “Las mañanitas” a todo pulmón y con una fotografía de cortesía, capturando el momento. Se han caracterizado por ser innovadores en detalles tan especiales como la preparación de la salsa y el guacamole a la vista del comensal, en su propia mesa, y creativos en el lanzamiento de platos tradicionales mexicanos, como los huevos motuleños, los huevos divorciados, los chilaquiles, el tablazo, los metros, el caldo tlalpeño, el huitlacoche, el mole, la salsa de flor de calabaza y los molcajetes.
Cabe destacar que todos los alimentos son elaborados con ingredientes frescos y 100% naturales, y son procesados en su planta de producción, con total exigencia en el cumplimiento de los procesos establecidos.
El crecimiento de Los Cebollines se fue dando poco a poco. El éxito del restaurante de Plazuela España generó la necesidad de abrir otras sucursales en distintos puntos de la Ciudad Capital y del interior del país para responder a la demanda de los consumidores. En 1998 llegó la expansión a otros países de Centroamérica; actualmente son 19 restaurantes, 16 de ellos se ubican en Guatemala y 3 en El Salvador.
Asimismo, en 1987, Los Cebollines creó una escuela de servicio a través de su departamento de Recursos Humanos. La formación de su personal se basa en la premisa de una atención eficiente, flexible y amable, además de las capacitaciones constantes al personal, que son parte fundamental de la cultura de servicio que los caracteriza.
Fiel a su esencia conceptual: “La meritita comida mexicana”, es un ejemplo de constancia, disciplina mercadológica y creatividad”.
Los Cebollines se ha mantenido en la preferencia del público por muchas razones, pero destaca su curiosa cualidad de abarcar un amplio espectro de grupos objetivos. Ha tenido la virtud, como pocas marcas, de mantener el diálogo comercial con los diferentes rangos de edades y segmentos socioculturales, y es el punto de reunión para desayunos, almuerzos o cenas familiares, sociales o de negocios.
El éxito no es una fórmula ni una receta de cocina. Los frutos de estas cuatro décadas se deben al rigor en la implementación de procesos, al estricto control de calidad y a la investigación y desarrollo culinarios. Son determinantes la consistencia en el seguimiento del concepto definido y la creatividad a la hora de enfrentar nuevos retos. También existen ingredientes clave, como la pasión por la excelencia, que definen el sabor y la personalidad de la marca.
Dentro de los desarrollos y nuevos conceptos que ha introducido Los Cebollines, destacan los productos listos para calentar y servir, ya que tienen la flexibilidad de adaptarse a distintos canales de servicio, como domicilio o el nuevo concepto “El Mercadito” que ya se encuentra vigente en varios de los restaurantes.
También se incursiona en el mercado retail, empacando y lanzando los famosos nachos que reciben a los comensales en el restaurante. Después de probar fórmulas y de trabajar en el desarrollo del producto, en octubre de 2015 ingresó al canal de supermercados con el nacho original, en la presentación de la bolsa azul.
La calidad de todos sus productos, tanto en restaurantes como en supermercados, es el resultado de rigurosos controles en los procesos de producción y distribución”.
Nachos Los Cebollines es una de las tres principales marcas en el mercado de snacks, que cuenta con grandes competidores. La línea de producción ya se ha ampliado a otros sabores: jalapeño, queso, ranch, barbacoa y chía/ajonjolí, los cuales están muy bien posicionados en la mente del consumidor y su preferencia se debe a la calidad del producto, su frescura y su crunch.
A la par de los nachos se han desarrollado las salsas Los Cebollines ranchera, verde y queso, también con excelente aceptación, no solo como el complemento perfecto para los nachos, sino también como base para variadas recetas de cocina.
La calidad de todos sus productos, tanto en restaurantes como en supermercados, es el resultado de rigurosos controles en los procesos de producción y distribución. Actualmente están presentes en las principales cadenas de supermercados en Guatemala, en tiendas de conveniencia, clubs de compras y supermercados independientes, entre otros. Los Cebollines se mantiene siempre buscando la innovación en las distintas áreas, con el mismo espíritu inquieto del primer día.
Los Cebollines está cumpliendo 40 años, razón por la que se siente sumamente agradecido con sus clientes y proveedores, con quienes tiene lazos de fidelidad; con los amigos entrañables que le dieron el impulso inicial al proyecto; y con tantos otros excelentes profesionales que, desde sus distintas áreas, forman parte de su crecimiento.
Decir Los Cebollines es hablar de una experiencia de buen gusto, alegría, celebraciones, familia y amigos, en un ambiente que invita a los comensales a sentirse en confianza, disfrutando del mejor sabor de la meritita comida mexicana.
Por: Los Cebollines