El índice de precios de fertilizantes del Banco Mundial, en el primer trimestre de 2023, presentó una disminución del 37%, después de alcanzar valores máximos a principios del año pasado; aunque no han alcanzado sus niveles más bajos, la tendencia se mantiene. Ante ese escenario, se proyecta que dicho índice baje un 7% en 2024.
La reducción de precios se debe a dos factores: primero, del lado de la oferta regresaron a producir algunas fábricas o incrementaron su producción, aumentando su disponibilidad, y segundo, por el lado de la demanda, los precios altos redujeron su uso.
Lo anterior demuestra la importancia del mercado de fertilizantes, el cual es un componente fundamental de la agricultura moderna. Estos productos juegan un papel esencial en el aumento de la productividad agrícola y en la satisfacción de la creciente demanda de alimentos a nivel mundial. A lo largo de los años, este mercado ha experimentado cambios significativos impulsados por factores como la tecnología, la sostenibilidad y la dinámica económica global.
El mercado de fertilizantes ha evolucionado hacia nuevas tecnologías que buscan una mayor eficiencia de los principales nutrientes”.
La clave: diversificación de productos
En Centroamérica, la agricultura es un pilar esencial de la economía, representando el 8.5% del Producto Interno Bruto (PIB) regional y siendo un motor clave de sus exportaciones. Los países de la región dedican alrededor de 7.6 millones de hectáreas a la producción agrícola; sin embargo, un hecho destacado es que la gran mayoría de fertilizantes son importados, lo que representa más del 90% del costo total de venta de estos insumos agrícolas, haciendo que los costos dependan directamente de los vaivenes del mercado mundial.
Esta característica de los insumos importados presenta un reto para la industria de fertilizantes en Centroamérica. Los precios internacionales de los mismos pueden experimentar volatilidad, lo cuales, si se gestiona de manera efectiva, pueden brindar oportunidades para mejorar la competitividad local.
Además, la vulnerabilidad ante los cambios en los mercados globales y los desafíos logísticos o de suministro en las cadenas de distribución internacionales, motiva a la industria local a desarrollar soluciones más eficientes y resilientes. Estos desafíos impulsan la adaptación y la innovación, lo que abre nuevas puertas tanto para la industria, como para la diversificación de productos.
En ese sentido, el mercado de fertilizantes ha evolucionado hacia nuevas tecnologías que buscan una mayor eficiencia de los principales nutrientes. Por ejemplo, además de hacer más eficientes las fuentes tradicionales de nitrógeno, fósforo y potasio, se han desarrollado materias primas especiales que se han adaptado eficientemente a cultivos específicos y a las necesidades de los suelos, mejorando así la salud de los mismos. Varias materias primas emergen de formulaciones que consideraron aspectos como la región, el clima, las características del área y las semillas, y el fruto en sí, mejorando la productividad de los cultivos.
Desafíos latentes
A pesar de su crecimiento continuo y luego de haber encontrado la fórmula para superar retos a nivel mundial, el mercado de fertilizantes enfrenta aún varios desafíos:
- Costos de producción: los costos de producción de fertilizantes pueden variar según los precios de los combustibles y los componentes clave como el gas natural.
- Regulaciones ambientales: cada vez hay más regulaciones que buscan reducir el uso de fertilizantes, invitando a mejorar su eficiencia y usando menos para producir más cosechas.
- Demanda internacional: Los mercados agrícolas más grandes tendrán una mayor atención de los principales fabricantes y proveedores, dificultando en ocasiones el acceso a los fertilizantes a precios competitivos.
El mercado de fertilizantes está en constante evolución y presenta oportunidades emocionantes para la industria”.
De cara a un futuro más sostenible
El mercado de fertilizantes está en constante evolución y presenta oportunidades emocionantes para la industria. La mejora continua de la tecnológica está permitiendo desarrollar fertilizantes más eficientes y amigables con el medio ambiente. Esta tendencia no solo es un beneficio para la agricultura en Centroamérica, sino que también para la seguridad alimentaria.
La inversión en investigación y desarrollo en fertilizantes de última generación puede dar lugar a productos más efectivos y rentables, y la optimización puede convertirse en un factor clave para la competitividad de la industria de este tipo de productos en la región.
Por último, el avance tecnológico en los productos, así como en la agricultura digital son oportunidades para la industria de fertilizantes que, junto a la capacidad de adaptación y resiliencia, puede fortalecer el mercado y contribuir al crecimiento sostenible de la agricultura en Centroamérica.
Por: Francisco Cárdenas | Director Estratégico de la Gremial de Proveedores de Insumos Agrícolas (GREMIAGRO)