La protección del ambiente es una obligación que todos los habitantes debemos cumplir, a través de la prevención de la contaminación y el mantenimiento del equilibrio ecológico. Con base en ello, es importante que todas las actividades que se implementen busquen cumplir con el principio de desarrollo sostenible, en el sentido de crear un balance entre el ambiente y el desarrollo social y económico del país. De esa cuenta surgen compromisos ambientales que establecen acciones que pueden implementarse para lograr alcanzar este objetivo.
Algunas de las obligaciones ambientales que toda actividad o proyecto deben cumplir son contar con un Instrumento Ambiental (EIA) aprobado por el Ministerio de Ambiente y Recursos Naturales (MARN) y con un Estudio Técnico de Aguas Residuales (ETAR). De estos dos instrumentos surgen obligaciones conocidas como compromisos ambientales que buscan que los propietarios de un proyecto implementen todas las medidas necesarias para que sus acciones no ocasionen daños al ambiente. Estos compromisos ambientales consisten en acciones periódicas y continuadas, cuyo principal fin es asegurar que un determinado ocasione el menor impacto posible al entorno.
Es recomendable establecer un plan de implementación de los compromisos ambientales para lograr su adecuado cumplimiento y así evitar sanciones”.
Es recomendable establecer un plan de implementación de los compromisos ambientales para lograr su adecuado cumplimiento y así evitar sanciones. Este plan de cumplimiento puede verse como una carga adicional para los particulares, sin embargo, permite a las empresas dar un uso eficiente a los recursos que emplean, prevenir daños ambientales irreversibles y fomentar su sostenibilidad a largo plazo. Su inobservancia puede llegar a ser penada por el MARN con fuertes multas que impacten las finanzas de la empresa, así como sanciones sociales por un rechazo a las acciones que ocasionan un daño a la sociedad en general. Además, existen ciertas acciones que pueden llegar a ser consideradas como delitos y, finalmente, ser sancionadas como delitos.
El Plan de Cumplimiento Ambiental incluirá las acciones que deben realizarse, su frecuencia y su metodología de cumplimiento. Este programa servirá como un instructivo que los proponentes de los proyectos, a través de su personal encargado, deberán seguir para lograr el objetivo propuesto. Estos planes deben entenderse como un documento “vivo”, de uso constante, que ayuda a la empresa a dar seguimiento a sus deberes de forma ordenada, y que va creando una cultura de responsabilidad ambiental entre sus colaboradores y autoridades. Por tal razón, el seguimiento constante de los compromisos ambientales a largo plazo logra la sostenibilidad de la empresa, pues da mayores rendimientos y evita gastos a futuro.
Por: Gabriela Platero | A&G Abogados y Gremial de Seguridad y Salud Ocupacional