Intendentes de SAT responden inquietudes
Abel Cruz, Leonel Villamar y Werner Ovalle, Intendentes de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), presentaron sus principales proyectos y retos en un desayuno con socios de Cámara de Industria de Guatemala, el 12 de octubre.
La conferencia inició con una breve presentación sobre las principales diferencias que introduce el Decreto 37-2016: Ley para el Fortalecimiento de la Transparencia Fiscal y la Gobernanza de la SAT y las reformas a la Ley Orgánica, por el Intendente Cruz.
En el Decreto, Cruz explicó que la SAT no tendrá acceso ilimitado a la información bancaria. Esta podrá ser revelada a esta institución (no a todos sus empleados) únicamente con una orden de un juez competente de los Tribunales de lo Contencioso Administrativo. Además, se requerirá bajo dudas razonables sobre operaciones contables, cumplimiento a nuevas regulaciones, suspicacia en declaraciones, entre otros.
Por otro lado, entre los cambios más importantes a implementar en la institución en el corto plazo se encuentra la separación de funciones del Directorio y la creación de Tributa, el proceso para nombrar Superintendente y la creación de la Intendencia de Atención al Contribuyente.
Cruz explicó que el Directorio ahora se integrará por el Ministro de Finanzas y un Viceministro suplente, el Superintendente de SAT y un Intendente suplente (sin voto), y dos miembros nombrados por el Presidente de la República. Estos últimos tendrán más restricciones para postularse, más limitaciones de acción en el Directorio y la misma responsabilidad jurídica que el resto de miembros, quienes estrictamente dirigirán la política de la SAT.
La creación del Tributa, en cambio, será la autoridad de la organización que conocerá y resolverá todos los recursos legales en materia tributaria que se presenten ante la institución. Esta libera de esta función al Directorio y agiliza los procesos de inconformidad con contribuyentes.
Además, el Superintendente de la SAT ahora tendrá más poder sancionatorio y será nombrado por cinco años por el Directorio, que también podrá removerlo.
Por último, la creación de la Intendencia de Atención al Contribuyente funcionaría como un ente que gestione administrativamente la SAT y fiscalice las demás intendencias para garantizar su transparencia.