En mi trabajo como consultor he visto que las empresas familiares dirigidas por gerentes generales no familiares logran mejores resultados que las que son dirigidas por gerentes familiares. Una explicación técnica es que la propiedad familiar separada de la gestión profesional se aleja de los conflictos inherentes al hecho de ser familiar. El gerente general con una junta directiva profesional, y una estructura de compensación adecuada, tienden a incrementar las posibilidades de alcanzar los objetivos estratégicos.
Incorporar gerentes externos a la empresa familiar tiene que ver con la supervivencia de la empresa. Así de contundente. Si una empresa quiere sobrevivir a la competencia tiene que ser dirigida y administrada de la manera más profesional posible, sin ningún tipo de privilegios que socave la competitividad. Esto se aplica tanto para empresas familiares como no familiares. Sin embargo, esto que a simple vista parece fácil y de sentido común, se complica en el caso de las empresas familiares. A los dueños y sus familiares, por lo general, les cuesta ver los límites entre la empresa, la familia y la propiedad.
Por eso es común observar a empresas familiares en esta encrucijada: El gerente familiar -a veces fundador(a)- se debe retirar por diversas razones. Supongamos que no se ha identificado un sucesor familiar adecuado, o simplemente que la familia ha decidido no estar al mando de la empresa.Entonces, se decide conseguir un gerente general externo. Si el sistema de gobierno de la empresa no está preparado, las probabilidades de fracaso del nuevo gerente son altas.
Para minimizar los riesgos de esto y mejorar las relaciones entre la familia y los gerentes externos, tome en cuenta las siguientes recomendaciones:
- No contrate a un gerente general no familiar sin antes integrar una junta directiva profesional con miembros externos independientes que contribuyan a objetivizarlas discusiones, y a dirigir y monitorear adecuadamente el desempeño del primer ejecutivo.
- Un gerente externo capaz es fuente de ideas frescas y es una forma de traer el talento que necesita la empresa.
- Describa claramente los objetivos, las responsabilidades específicas del cargo, y su relación con junta directiva.
- Considere paquetes atractivos de compensación. Mire el mercado.
- Observe la experiencia profesional, y sobre todo, el manejo emocional de la persona, pues en una empresa familiar se necesita de mucha resiliencia y capacidad de negociación.