Algunos de los alimentos que consumimos a diario se mantienen en refrigeración para alargar su tiempo de vida. En muchos de estos procesos, existen cámaras refrigeradas que ayudan a la conservación de la comida, estas bajo la supervisión de trabajadores expuestos a bajas temperaturas que representan riesgos para su salud a corto, mediano y largo plazo.
El cuerpo humano tiene el metabolismo que le sirve de termostato para regular y proteger los órganos vitales. Automáticamente, al momento en el que el cuerpo se enfría, las personas cruzan los brazos, se soplan las manos para sentir aire caliente e inician los temblores involuntarios. El problema es que el calor que genera el cuerpo se libera al aire libre y sigue bajando la temperatura corporal cortando el flujo de sangre en las extremidades y órganos, hasta llegar a la muerte.
Luego de comprender cómo funciona nuestro cuerpo, es necesario conocer los riesgos laborales que esto representa. El trabajador, al empezar a sentir frío, pierde la concentración de la tarea que realiza, por consecuente se cambia de entorno para buscar calor, pero a su retorno la temperatura baja le vuelve a afectar. Este cambio brusco puede provocarle enfermedades respiratorias.
Desde el punto de vista económico, también representa un problema debido al tiempo perdido por cada vez que el colaborador sale de su área de trabajo en busca de un lugar cálido. También, si se reporta enfermo hay que considerar colocar a otra persona en su puesto.
Para evitar estos incidentes, un aspecto importante es contar con el equipo adecuado, en este caso un atuendo que resguarde a la persona del frío y mantenga la temperatura del cuerpo en un nivel estable. La ropa especial para cuartos fríos no es una barrera para evitar que las bajas temperaturas afecten al cuerpo, sino que funciona de manera que mantiene el calor corporal para no sufrir un cambio brusco.
Se recomienda que los materiales de la ropa de protección de frío sean fabricados de fibras sintéticas, ya que tienen una capa exterior impermeable y una muy baja absorción de humedad que permitiría el paso del frío a través del agua muy fácilmente y eliminar la protección que pueda proporcionar la ropa.