En medio de profundas transformaciones socioeconómicas, el 30 de julio de 1943, se aprobaban los estatutos y se elegía la primera Junta Directiva de la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR), presidida en aquel entonces por el Sr. Raúl Odio Herrera, con el firme propósito de apoyar al sector industrial costarricense.
“Desde su fundación, la CICR se ha destacado no solo por promover y acompañar al sector industrial costarricense, sino también por impulsar el desarrollo económico y social del país, a través de una fuerte labor de representatividad. A lo largo de estos 80 años, muchos han sido los retos superados y los logros alcanzados. Apoyamos importantes leyes, varias surgieron de propuestas de nuestra organización, así como políticas públicas y reformas institucionales que han contado con la activa y propositiva participación de la Cámara”, comentó Sergio Capón, presidente de la CICR.
En 1959, la Cámara impulsó y logró que se aprobara la Ley de Protección Industrial, bajo la presidencia de la Junta Directiva del Sr. Rodrigo Madrigal Nieto, que fue fundamental para consolidar el proceso de industrialización que había iniciado en los años cuarenta, y cimentar el proceso de sustitución de importaciones y de integración regional, que se materializó con la Adhesión de Costa Rica, en 1963, al Tratado Multilateral de Libre Comercio e Integración Económica Centroamericana.
Pasando por el rol protagónico que la CICR tuvo en el proceso de negociación de acuerdos comerciales bilaterales y multilaterales en los años noventa, a inicios de este siglo, la CICR fue promotora de tres leyes fundamentales, visionarias y de largo alcance: la Ley 8056 de Negociaciones Comerciales y Administración de Tratados Comerciales, aprobada en el 2000; la Ley 8276 del Sistema Nacional de la Calidad; y la Ley 8262 de Fortalecimiento de las Pequeñas o Medianas Empresas o Ley PYME, como se le denomina normalmente, ambas aprobadas en abril de 2002.
Es así como esta organización, que históricamente ha participado en la definición de las políticas públicas que han marcado el desarrollo del país, actualmente cuenta con ocho áreas de trabajo clave para el sector empresarial, desde donde se mantiene vigilante y proactiva en la discusión de temas que impactan en la competitividad del país, mediante posiciones sustentadas con rigor técnico. Estas comisiones son: Asuntos Económicos y Fiscales; PYME; Energía Electricidad y Combustible; Comercio Internacional y Logística; Talento Humano; Ambiente y Responsabilidad Social; Calidad y Mejora Regulatoria; e Innovación.
“Para llevar adelante esta tarea la CICR cuenta con un equipo técnico y ejecutivo con capacidad y experiencia demostradas para analizar con criterio técnico las políticas y propuestas de ley que se discuten, sean iniciativas del poder ejecutivo, legislativo o propuestas del sector privado, que impactan en la operación, desarrollo y crecimiento de las empresas, con el objeto de incidir de forma consistente con las necesidades del país, aportando en mejorar la competitividad y la generación de empleo”, indicó Capón.
El 30 de julio de 1943, se aprobaban los estatutos y se elegía la primera Junta Directiva de la Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR)”.
De una Cámara sectorial a una organización proactiva de impacto nacional
Con más de 800 empresas afiliadas que van desde pequeñas y medianas, hasta organizaciones transnacionales, la CICR es el principal referente que apoya al sector productivo de Costa Rica, impulsando las políticas que favorecen la competitividad, la sostenibilidad y la generación de empleo, apoyando al sector privado en prácticas empresariales que promueven la excelencia a estándares internacionales.
En la actualidad, la CICR se autodefine como una organización autónoma que apoya al sector productivo que genera empleo formal, con un objetivo amplio de traer bienestar a toda la sociedad costarricense. Para ello se ha desarrollado especialmente en áreas clave, como la excelencia empresarial con sus programas de mejora continua; el talento humano, con importantes articulaciones público – privadas, como lo es el programa de formación dual; y la capacitación, las consultorías y la innovación, que ofrecen un dinámico programa de actualización para profesionales y empresas.
“En 80 años hemos logrado aportar a la sociedad costarricense, evolucionando de forma responsable y práctica, y apoyando la producción y el empleo con una visión a futuro. Es por ello que estamos seguros de que, con la madurez y experiencia lograda, el talento humano costarricense, la capacidad para innovar, la conciencia ambiental y social, y en un ambiente tecnológico que abre oportunidades para todos, podremos continuar en la creación de un futuro y bienestar por muchos años más”, remarcó el presidente de los industriales de Costa Rica.
La CICR se autodefine como una organización autónoma que apoya al sector productivo que genera empleo formal”.
Aporte sostenido a la innovación, la excelencia empresarial y la mejora continua
El programa a la excelencia empresarial de la CICR es un fuerte referente y músculo de apoyo y mejora continua empresarial. Uno de sus principales objetivos es estimular, tanto en las organizaciones públicas como en las privadas, la búsqueda continua de una cultura de excelencia como mecanismo para impulsar a las empresas hacia estándares de clase mundial. Esto quedó plasmado al instaurarse el Día Nacional de la Excelencia, declarado el 20 de noviembre de 1997 por Decreto Ejecutivo No. 26533.
“En el 2022, el programa a la excelencia CICR cumplió 25 años de aportar valor y llevar a nuestras empresas hacia estándares de calidad internacionales. Desde entonces, el modelo de excelencia de la CICR ha tenido 821 participaciones en sus procesos de mejora empresarial y cuenta con más de 200 evaluadores activos que realimentan a las empresas, aportando más de 4 mil 500 horas de trabajo al año”, añadió Capón.
Respecto a un factor decisivo para la competitividad como lo es el talento humano, la CICR creó la Ventanilla Única de Talento Humano, que trabaja en la identificación de las necesidades de formación técnica y capacitación, vinculando la demanda de formación empresarial con el sector académico. De esta manera se impulsan procesos de actualización y validación de programas de educación y formación técnica con centros educativos públicos y privados e implementa el protocolo de formación dual con el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA), como articulador de alianzas público – privadas.
Con el propósito de aportar valor al sector productivo del país, la CICR históricamente ha desarrollado programas de capacitación y, formalmente, desde 1991 ejecuta un completo programa de capacitación y consultorías, desarrollando así una plataforma de mejora continua, con cursos, seminarios y congresos, así como un robusto apoyo en asesorías para empresas y profesionales, cuyo propósito es extender al país formación de calidad, en cuanto a su pertinencia, actualidad y posibilidades de aplicación práctica.
Finalmente, debido a la importancia de la innovación en la estrategia de desarrollo y competitividad de las empresas, la CICR desarrolla programas para incorporar la innovación en la estrategia de las empresas, como innovación para la exportación, programas de marketing digital, programas de desarrollo de proveedores y encadenamientos productivos. Todo en armonía con la incidencia para mejorar el ecosistema de la innovación que debe desarrollarse por la triple hélice: Gobierno, Universidades y sector productivo privado.
La CICR desarrolla programas para incorporar la innovación en la estrategia de las empresas”.
“La visión de la CICT para el futuro de nuestra industria es una que abraza la innovación y la sostenibilidad como pilares fundamentales. Una industria en la cual, no solo el Régimen de Zona Franca, sino también las PYMES de capital nacional que operan en el régimen definitivo, sean más intensivas en conocimiento, logren un aporte estratégico al valor agregado y al empleo que se genera en el país, con una mayor capacidad de investigación y desarrollo, que a su vez les permita generar encadenamientos productivos de alto valor para brindar soluciones país o mejorar la competitividad de otras industrias a nivel nacional e internacional”, concluyó Capón.
Por: Cámara de Industrias de Costa Rica (CICR)