El ser humano es fascinante, pues somos una especie capaz de empujar nuestros propios límites para ser mejores y alcanzar nuestros objetivos. La inteligencia artificial (IA), actualmente genera incertidumbre en la mayoría de los seres humanos, ya que se percibe como cuando el médico nos da un diagnóstico y nuestra reacción depende de lo que sabemos o no de la misma condición; a menor información, mayor la incertidumbre y, por ende, miedo.
Un ejemplo espectacular de esto son las infecciones. Antes de Alexander Fleming, un cuerpo infectado podía generar muerte en la mayoría de los casos; en la actualidad, para combatir muchísimas infecciones, solo debemos tomar algún medicamento, por lo que nuestra preocupación es mínima.
Tenemos que comprender que la IA, al igual que la radio, el teléfono, la televisión o el Internet, en sus inicios generaron temor, pero han traído grandes avances y mejoras a la humanidad. De la misma forma, la revolución que viene de estos avances hará de nuestras vidas algo más placentero, productivo y gratificante, siempre y cuando nos instruyamos sobre el tema y sepamos sacarle provecho.
Ahora, ChatGPT está en boca de todos, pues provee la posibilidad de usar esa IA a favor de nuestros propósitos, pero la misma tiene mucho tiempo de existir. Alan Turing, de 1940 a 1949, estableció las bases para lo que hoy conocemos como razonamiento mecánico artificial o IA, lo que nos ha ayudado a avanzar como especie.
Para la productividad empresarial ya existen herramientas de muchísima utilidad”.
Actualmente, la IA ayuda en el diagnóstico de enfermedades, a controladores aéreos manejar el flujo aeronáutico o a planificadores urbanos a predecir el incremento de la masa vehicular, a través de una serie de instrucciones y bases de datos que con comandos informáticos nos dan respuestas antes imposibles o muy tardadas. De esta forma, el doctor diagnostica más rápido, el piloto evita accidentes y el planificador sabe en dónde y cómo crear mejores carreteras antes de que las grandes ciudades se congestionen más.
Guatemala no sería la excepción, ya que podríamos reducir las colas de centros de salud pública con un diagnóstico más rápido y acertado, el tránsito vehicular de nuestra ciudad podría mejorar dramáticamente o problemas sociales como la desnutrición o la criminalidad podrían tener información certera y en tiempo real, con proyecciones para tomar medidas preventivas y no correctivas para el futuro de nuestra sociedad. Otro campo importante para mejorar podría ser la gestión de trámites dentro de las instituciones públicas, lo cual nos generaría menos costo como ciudadanos y nos daría la oportunidad de que comunidades alejadas tengan acceso a servicios que ahora no se tienen.
Para la productividad empresarial ya existen herramientas de muchísima utilidad que logran que cada colaborador alcance sus objetivos en menor tiempo con mayor calidad. Algunos de ellos son:
- Para creación de contenidos: Jasper y Surfer.
- Para mejorar redacción en inglés: Grammarly, Wordtune y Hemingway.
- Para generación de imágenes: Neural, Stable Diffusion, Dall-E2 e Illustroke.
- Toma de notas: MEM.
- Creación de video: Fliki y Sinthesia.
- Transcripción: Otter.
- Presentación: Beautiful.
- Investigación: Genei.
- Automatización: Zapier Openai.
La IA no representa una amenaza a corto plazo, sino una gran ventaja en la productividad personal y empresarial”.
La búsqueda autodidacta nos dará como resultado ser pioneros en nuestro entorno en el uso de estas herramientas. Vale la pena invertir tiempo y un poco de recursos en la mensualidad que proponen algunas de ellas, que nos darán como resultado un trabajo más fluido y nos desbloquearán la mente con una ayuda más gráfica, visual y auditiva en nuestras labores cotidianas.
En conclusión, la IA no representa una amenaza a corto plazo, sino una gran ventaja en la productividad personal y empresarial. Esto logrará que las nuevas generaciones sean mucho más creativas e independientes, con mayor velocidad. Nuestro deber es aprender y guiar para el mejor uso de las mismas.
Por: Juan Carlos Rodríguez Paniagua | CEO de Homeland S.A.