Cada vez más las empresas están cambiando sus prioridades mediante el uso de la inteligencia comercial, no solo para ahorrar costos, sino también para ser conscientes del medio ambiente. La capacidad de la inteligencia empresarial para realizar un seguimiento del rendimiento, así como para alertar a los responsables de la toma de decisiones sobre los cambios de comportamiento, lo convierten en un enfoque complementario, como lo ha demostrado el deseo de muchas empresas de ser más ecológicas. Por lo anterior, en las mejores prácticas ambientales de la industria, debe existir una hoja de ruta clara que vincule la inteligencia comercial con iniciativas ecológicas.
La continua reducción de los recursos naturales ha llevado a las corporaciones que tienen grandes requerimientos de energía a ser más conscientes que antes con el medio ambiente. Esto se debe a que algunos gobiernos apoyan iniciativas ecológicas con las que no solo ahorran costos, reutilizan recursos y cumplen con los requisitos de cumplimiento, sino que también ayudan a crear reconocimiento de marca entre sus clientes.
Cada vez más las empresas están cambiando sus prioridades mediante el uso de la inteligencia comercial”.
Además de reducir el consumo de energía, las organizaciones que utilizan la inteligencia comercial también invierten en esfuerzos de investigación y desarrollo, apoyando iniciativas de responsabilidad social que están orientadas a productos y procesos internos amigables con el medio ambiente.
Las empresas automotrices tienen el estigma de ser las que más contaminan, sin embargo, Ford Motor Company, por ejemplo, cambió esta narrativa a través de su política ambiental, pues utilizan tejidos sostenibles en sus vehículos, mientras que el 80% de sus vehículos Focus y Escape son reciclables.
La compañía también se enfoca en la eficiencia del combustible, particularmente en la transmisión de seis velocidades. Además, los vapores de pintura en la planta de la empresa en Michigan se reciclan como combustible, utilizan sistemas de refrigeración geotérmicos, los vehículos que venden a la policía tienen una capacidad de funcionar con etanol o gas, poseen el techo verde más grande del mundo y es la única empresa que ha ganado dos veces seguidas el premio Energy Star de la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos.
Por: Melanie Müllers | Ph.Dc.