El outsourcing, subcontratación o tercerización es la práctica comercial de contratar a un tercero (fuera de la empresa) por algún tiempo determinado para que realice una o varias tareas específicas, las cuales eran llevadas a cabo por el personal propio. Es una estrategia de negocio, es ceder responsabilidades a un especialista que nos agregará su fuerza de trabajo, tecnología y una visión profesional en el área a tercerizar, en la que cuenta con mayor experiencia que la organización. Esto también incrementa la oportunidad de incursionar rápidamente en mercados internacionales sin la inversión en infraestructura que implica la apertura de una operación nueva.
Al contratar el servicio de outsourcing, las empresas tendrán la oportunidad de mejorar la rentabilidad del negocio y de enfocar sus esfuerzos y recursos en función de su actividad principal para que los procesos operativos o que no forman parte de su core business sean más eficientes. Además, contarán con el asesoramiento y apoyo de expertos en el área del servicio que solicitaron, por lo que garantizarán el logro de objetivos organizacionales en los plazos establecidos. De esta forma se convierte en una propuesta de valor que emplean las compañías para fortalecer los servicios y ajustarse rápidamente a las necesidades de sus clientes y de la empresa misma.
En una economía cambiante a nivel mundial las ventajas que aporta el outsourcing son cada vez más. La reducción de costos y la flexibilidad son algunos de los principales beneficios de implementarlo, esto quedó demostrado durante la cuarentena y restricciones por COVID-19. Aquellos empresarios con personal propio debieron asumir y mantener el pago de salarios y prestaciones, aun cuando sus compañías redujeron sus ventas drásticamente. En cambio, los negocios que cuentan con servicios de outsourcing solo tuvieron que suspender o cancelar servicios, ya que lo que se contrata es un servicio, sin tener vínculos patronales con los empleados de su proveedor.
Al contratar el servicio de outsourcing, las empresas tendrán la oportunidad de mejorar la rentabilidad del negocio”.
Entre los principales beneficios del outsourcing destacan los siguientes:
- Tiempos de respuesta más rápidos en la contratación de mano de obra
Arrancar un nuevo proyecto implica reclutamiento, filtrar candidatos, publicación de ofertas de empleo, contrato de trabajo, carnet de identificación, confección de uniformes, capacitación y considerar reemplazos en el caso de ausencias, entre otros. Son muchas actividades para un departamento de recursos humanos que probablemente trabaje desde su casa o que por protocolo ha limitado el ingreso de visitantes a sus oficinas, pero al subcontratar le corresponderá a otros realizarlas. Además, el negocio se limitará a medir resultados y que se cumpla a cabalidad con el servicio contratado y el proveedor se convierte en su departamento de recursos humanos sin tener que pagar los costos que esto implica: salarios, prestaciones, horas extras, servicios básicos, telefonía, papelería, etc.
- Reducción de costos
El outsourcing convierte los costos fijos en variables, libera capital para la inversión en otra parte de su negocio y le permite evitar grandes gastos en las primeras etapas de su negocio. Además, podemos contratar por evento, sin cargar con costos fijos ni grandes inversiones en maquinaria, equipo o tecnología que traerá consigo el proveedor del servicio.
El costo financiero y flujo de efectivo se beneficia también, pues si el proveedor le brinda crédito, no deberá desembolsar salarios, cuotas patronales o multas por no pagarlas a tiempo, pudiendo invertir o priorizar otros rubros sin afectar los resultados o procesos por falta de personal.
También permite que la empresa tenga lo mejor en tecnología, sin necesidad de adquirir el equipo o capacitar a su personal. No necesitará comprar equipo para realizar ciertos procesos, pues tendrá a alguien haciéndolo por usted con sus propios recursos.
- Flexibilidad
Otro beneficio que debe considerarse es la flexibilidad de aumentar o disminuir recursos de acuerdo a la necesidad o a la temporalidad, ya que ayuda a mejorar la calidad y le permite especializarse y enfocarse en su producción, entre otros.
El COVID-19 hizo que los hábitos de vida y de consumo cambiaran para todos, obligando a las empresas a rediseñar sus estrategias y modelo de negocios de la noche a la mañana, siendo el outsourcing la manera más rápida para ejecutar estos planes. Con el retorno a la normalidad, las compañías deben focalizar sus esfuerzos en vender y recuperar clientes, adaptándose rápidamente a los cambios.
En una economía cambiante a nivel mundial las ventajas que aporta el outsourcing son cada vez más”.
- Mayor productividad
Al reducir costos por medio del outsourcing, puede invertir más presupuesto en su producción, en la promoción de sus marcas o en su fuerza de ventas, incluida maquinaria o tecnología que también le permita ser más eficiente y competitivo, enfocándose en los procesos estratégicos de su negocio.
Son muchas las ventajas que se pueden obtener al implementar el outsourcing en uno o varios procesos de la organización, sin embargo, es importante establecer un proceso de comunicación claro y fluido con su proveedor, de forma que sea una verdadera extensión de su negocio y se genere valor para la empresa, clientes y colaboradores.
Por: Ruth Revolorio | CEO de The People Company y vicepresidente de la Gremial de Empresas de Outsourcing