Como empresarios debemos participar activamente en programas de reducción de la contaminación del ambiente.
Los desechos sólidos son parte de la vida cotidiana de los seres humanos. Se estima que, en áreas urbanas de Guatemala se generan entre dos y tres libras al día, por persona. Es difícil concebir que en una familia promedio de cinco integrantes, se generan tres toneladas métricas al año, aproximadamente, de lo que comúnmente llamamos basura.
En el mejor de los casos estos desechos son trasladados a un sitio autorizado de disposición final (cuando se paga servicio de extracción de basura). Sin embargo, en Guatemala un altísimo porcentaje de estos sitios son simples verteros a cielo abierto con escasas técnicas de tratamiento.
Es evidente que somos parte activa de una contaminación sin control, pero es importante mencionar que existe la posibilidad de ayudar a disminuir el impacto ambiental por generación de desechos sólidos, esto sucederá cuando exista un compromiso real de cada persona en el manejo adecuado de su basura. No es difícil, solo se necesita tener la convicción de responsabilizarse por la contaminación que se genera cada día.
En empresas
Al darle un vistazo a lo que sucede con los desechos de las empresas en las que trabajamos, el fenómeno es el mismo. Aunque los volúmenes y materiales son inherentes al giro de la actividad de cada empresa.
Para reducir la contaminación por desechos sólidos, podemos empezar con el programa de reciclaje.
Este es parte de la Responsabilidad Social de nuestra Empresa.
Tomar acción es fundamental, de nada sirve ver y leer en las redes sociales cantidad de información al respeto y en ocasiones hasta nos conmueve y compartimos. Lo único que ayuda es participar activamente en programas de reducción de la contaminación del ambiente.
En principio, se deben separar al menos en dos grupos. Los orgánicos (naturales, que se pudren) y los inorgánicos (el resto, normalmente son los artificiales, los que no se pudren).
Los dos grupos se pueden aprovechar: Los primeros se pueden convertir en abono. Y con los segundos, la mayoría se puede aprovechar, reciclándolos.
Separar es solo un paso
Recuerde que reciclar es un proceso, separar es solo un paso. Si entrega al servicio de extracción de basura su material, no garantiza que será reciclado. Su compromiso es buscar un centro de acopio adecuado, indudablemente este es el precio de un ambiente sano, así nos garantizamos de agua y aire limpio.
En el caso de las empresas, para implementar su programa de reciclaje es importante buscar empresas formales que le apoyen en la implementación, estas le garantizan el manejo adecuado de sus desechos.
Cámara de Industria de Guatemala, cuenta con una Gremial de Recicladores, que apoya a las compañías en el manejo responsable de sus desechos. Si desea información puede comunicarse con Karina Rivera, al correo [email protected]
Ángel Toledo
Presidente
Gremial de Recicladores de Guatemala