OTRO MOTIVO
DE ORGULLO
EMPRESARIAL
Javier Zepeda
Director Ejecutivo Cámara de Industria de Guatemala
El Sector Privado de Guatemala tiene muchas cosas de las cuales enorgullecerse. Desde esta tribuna hemos escrito sobre la importancia del emprendimiento por que la única forma de generar crecimiento económico sostenible en un país es através de la inversión privada.
Por supuesto que la inversión pública tiene su importancia, especialmente en infraestructura, pero recordemos que es producto de las contribuciones fiscales de los ciudadanos, especialmente de las empresas, que son las que más tributos aportan por su propia naturaleza. De manera que hay más inversiones públicas si la iniciativa privada se desarrolla.
Con esto no quiero decir que las inversiones públicas sean negativas; al contrario, generan beneficios si se realizan con transparencia y eficiencia, pero no podemos pasar por alto el hecho de que las inversiones públicas están sujetas a las decisiones de quienes, circunstancialmente, ocupan cargos de dirección política, que en nuestro caso no duran más de cuatro años.
De allí la importancia de reconocerlas inversiones privadas como fuente generadora de empleo formal y sostenible, el cual, a su vez, procura mayor bienestar a través de las prestaciones sociales que se otorgan, y acceso a la recreación, por mencionar algunos.
Hay inversiones privadas que no solo tienen incidencia directa en el mejoramiento del nivel de vida de sus trabajadores, directos o indirectos, sino también ayudan al resto de habitantes. Ese es el caso de la VAS, que conectará la ciudad capital con los municipios contiguos ubicados en esa región.
Esta nueva carretera de 25 kilómetros aproximados ayudará a resolver el creciente problema del congestionamiento en ese sector del país, de manera que estaría de más indicar los beneficios que representará para quienes transitan por ese sector, en términos de salud emocional y física, y ahorro de recursos valiosos.
Hay, por tanto, un doble beneficio en ese proyecto, pero hay un aspecto más que es necesario destacar y se trata de la voluntad de los empresarios que corren los riesgos, inclusive con endeudamiento. Aquí hemos sostenido que hay guatemaltecos con visión de país que siguen invirtiendo en el futuro, con la esperanza de que Guatemala crezca económicamente.
Vaya, pues, nuestro reconocimiento a los emprendedores que decidieron construir esta importante obra, porque también lleva consigo grandes beneficios para este hermoso país. ¡Felicitaciones!