Los horarios de oficina, las reuniones y los imprevistos de trabajo son algunos de los contratiempos que dificultan llevar una dieta saludable. Revista Industria y Negocios ha preparado algunos tips para ayudar en ese trabajo diario.
Todas las mujeres buscan ese equilibrio entre el trabajo y el cuidado personal. Uno no debe suplir al otro. Para mantener el peso ideal, no solo con el objetivo de ayudar a la buena salud, sino, también, para lucir una imagen ideal, hay que atender algunos consejos básicos.
La primera recomendación es evitar comer en el escritorio. Es preferible ir al comedor de la oficina o a una plaza de forma tranquila y disfrutar los alimentos.
La Liga contra la obesidad y el sobrepeso de Guatemala recomienda reservar un momento para sí mismo en donde se pueda descansar y disminuir la tensión. “Tomar tiempo para relajarse es indispensable para sentirse bien y en forma en todo momento”, aseguran en su página de Facebook.
Lo vital es un desayuno ligero y saludable, que sea suficiente para cosechar los beneficios de comer temprano. Si está compuesto de proteína y granos integrales, entonces evitará que coma desmedidamente en el almuerzo, afirman los expertos.
“Si se salta el almuerzo, luego tendrá más hambre y comerá en exceso. Lo mejor será que siempre se haga una pausa para comer”, expresó Emilio Valenzuela, nutricionista.
Es bueno llevar frutos secos, galletas de arroz o barritas de cereales en la cartera para comer como snacks saludables cuando le sorprenda el hambre a media mañana o tarde. Estos alimentos son eficaces a la hora de mitigar el hambre sin añadir calorías extras.
Es importante llevar a la oficina bebidas bajas en calorías y establecer el objetivo de ingerir por lo menos 5 porciones de fruta y verdura todos los días. Para lograrlo puede preparar batidos de frutas, sopas de hortalizas y escoger fruta para comer entre horas. Además, de no menos de 6 vasos de agua pura.
Resulta que en ocasiones se presentará una refacción con pastel, tacos o golosinas, con motivo de festejar a un compañero y hay que participar. La sugerencia es ingerir la mitad de una ración normal.
Otro importante consejo es hacer cómplices a los compañeros de la dieta, para que puedan apoyar el régimen e incluso supervisarlo. Así que seguir una dieta en la oficina sí es posible.