La compañía ha cumplido con los estándares locales e internacionales relacionados con el ambiente. Asimismo, se ha congratulado por la postura del Gobierno, quien ha reconocido que la empresa no ha provocado daños en las fuentes de agua ni en la salud de las comunidades donde opera.
Industria y Negocios
La compañía Montana Exploradora, subsidiaria de Gold Corp y operadora de la mina Marlin, ha invertido en el país más de Q2 mil millones, entre recursos directos en la explotación minera, pago de impuestos y regalías al Estado así como en programas de Responsabilidad Social Empresarial, desarrollados en las comunidades rurales donde opera. Pero más allá del derrame económico y las miles de fuentes de trabajo que genera directa e indirectamente, la empresa ha sido cuidadosa en el cumplimiento de la legislación ambiental local, superando los estándares internacionales sobre los cuales Gold Corp trabaja.
Ante las recientes medidas cautelares requeridas por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) al Gobierno de Guatemala, Gold Corp ha manifestado su interés y compromiso por el respeto a la legalidad nacional e internacional, en especial, en el área de derechos humanos. Gold Corp expresó su satisfacción porque el Gobierno reconoció, públicamente, que la mina Marlin no ha causado contaminación ambiental ni mucho menos en las vertientes acuíferas ni ha provocado enfermedades o problemas de salud a los pobladores de las comunidades aledañas a la operación.
Gold Corp señaló que estas prácticas de operación de Montana son consistentes con lo que pública y privadamente, la compañía, las instituciones rectoras del Estado así como grupos de monitoreo independientes, han establecido en torno al manejo responsable y de clase mundial de sus actividades técnicas, sociales y ambientales. Sus personeros, ha manifestado su expectativa de que se cumpla el debido proceso en este tema.
Asimismo, Gold Corp reiteró que, dado su respeto y cumplimiento de las normativas técnicas, ambientales y sociales, contempladas en la legislación de Guatemala e internacional, no se pondrán en riesgo los empleos de sus colaboradores, que suman unos 10 mil, entre directos e indirectos. Tampoco se detendrá el apoyo permanente a las poblaciones ni afectará el clima de negocios del país.