La red de Voces Vitales de la región urgió a los Gobiernos de la necesidad de involucrar más a la mujer en la toma de decisiones.
Industria y Negocios
El pasado 25 de mayo, Guatemala fue el país anfitrión de más de 500 mujeres líderes de Centroamérica que convergieron en un foro organizado por la llamada red centroamericana de Voces Vitales, quienes plantearon una serie de proyectos y propuestas para encausar a la región por mejores derroteros. Además, aprovecharon para pedir a los Gobiernos, más espacios que permitan contribuir en el desarrollo de las sociedades.
Entre las participantes destacaron, Alyse Nelson, presidenta y cofundadora de Vital Voices Global Partnership y colaboradora de Hilary Clinton y de la ex secretaria de Estado Madeleine Albright; la fundadora de la Coordinadora Nacional de Viudas de Guatemala (Conavigua) Rosalina Tuyuc; María del Carmen Aceña, ex ministra de Educación de Guatemala; Yara Argueta, presidenta del Grupo Solid; María Nelly Rivas, ex ministra de Turismo de Nicaragua y María Eugenia Brizuela, directora de responsabilidad social corporativa de HSBC y ex canciller salvadoreña.
Durante el evento, las participantes se dividieron en grupos y analizaron problemas generales de la región y consignaron sus sueños, además de discutir posibles propuestas y soluciones en cinco áreas: Administración pública e instituciones, violencia y crimen, educación y salud, desarrollo económico y empleo y seguridad social. “Estamos aquí porque también queremos remar; son los hombres los que principalmente habían remado pero el mundo está cambiando. No buscamos supremacía sino igualdad, queremos espacio para remar con nuestras familias”, expuso Carolina Roca, ex jefa de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), al momento dar a conocer las conclusiones del evento.
Roca destacó que este debate se distinguió por una concepción holística de los problemas y las propuestas, con un enfoque incluyente, no cargado en el pasado sino mirando al futuro y colocando la responsabilidad de las soluciones en las familias, empresas y no solo en los gobiernos. En la mesa de educación, por ejemplo, se insistió de la necesidad de involucrar a los diferentes actores de la sociedad, en la formación y compromiso de docentes, en la necesidad de aumentar los recursos privados y públicos, premiar la excelencia y transparencia, impulsar la educación bilingüe, ampliar la cobertura desde temprana edad y crear carreras técnicas. Asimismo, en seguridad, se hizo énfasis en la prevención de la violencia, principalmente entre los jóvenes.
Hay que trabajar en prevención
María del Carmen Aceña, del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales y consultora en temas sociales, reiteró la necesidad que tiene la sociedad guatemalteca de trabajar en la prevención de la violencia, especialmente entre los jóvenes, pues cuando ya ingresan en las pandillas, se hace más difícil. Aceña lideró una investigación para determinar las causas por las cuales muchos adolescentes ingresan a las denominadas “maras” y explicó que este problema se puede prevenir. “Encontramos que la mayoría de jóvenes se integran a la violencia porque vienen de hogares desintegrados, porque abandonan la escuela, no terminaron la primaria y son manipulados por otros jóvenes debido a que son vulnerables”. Pero este problema se puede evitar si el Gobierno, con el apoyo de la sociedad civil, trabaja en políticas públicas coherentes, señaló Aceña.
El problema, con el actual Gobierno de Guatemala es la inestabilidad de ministros de Gobernación y poca visión en las políticas públicas. Sin embargo, dijo que los problemas de violencia de pandillas debe ser analizado por los tres países: Guatemala, El Salvador y Honduras.
Las más de 500 mujeres participantes pidieron transparencia en el gasto público de los Gobiernos.