A 61 años de la proclamación de la Independencia de Israel, por el líder sionista, David Ben-Gurión, Israel ha enfrentado guerras y una continua lucha por la paz, masivas inmigraciones de más de 70 países.
Hoy deseo recordar aquellos eventos que marcaron el inicio de una amistad entre Guatemala e Israel. Así el 29 de noviembre de 1947, la Organización de las Naciones Unidas decide el establecimiento en Palestina de un estado judío y otro árabe, bajo el dominio de Inglaterra. Obviamente, Israel deseaba como cualquier país su independencia, esto hizo que el tema fuera llevado ante el seno de las Naciones Unidas, quien le concediera de plazo hasta el 15 de mayo de 1948, para que la ganara con el voto de sus países miembros. La lucha diplomática fue dura; sin embargo, el 15 de mayo de 1948 fue un día predestinado, ya que faltando una hora para que venciera el plazo, ningún país había reconocido oficialmente a Israel y se necesitaba un mínimo de dos votos para que la resolución quedara firme, de pronto a las 17:11 horas de ese día, el Presidente Harry Truman anunciaba que los Estados Unidos de América, reconocía a Israel, fue entonces cuando un país pequeño, pero grande de corazón, Guatemala, secundara tal decisión. Este fue uno de los tantos legados del gobierno de Juan José Arévalo, así como de su Representante Permanente ante las Naciones Unidas, el Embajador Jorge García Granados. Durante la ratificación del día siguiente, es importante mencionar que los demás países latinoamericanos y casi la totalidad de los demás países de las Naciones Unidas, ratificaron los votos emitidos por Estados Unidos y Guatemala.
Dígalo coincidencia, pero a diferencia de muchos países, muchos guatemaltecos por diferentes razones se sienten identificados con el pueblo judío, y con Israel, basta con caminar por diferentes sectores populares de Guatemala, y encontraremos muchos comercios, como peluquería “Shalom”, tienda “Bethel”, carnicería “Samuel”, agencias de seguridad, y así un sinfín de nombres que relacionan la tradición Judía con el folklore guatemalteco. En boca de miembros de la comunidad Israelí en Guatemala…“nos sentimos queridos en este país…”. Seguro que algunos de ustedes llevan o conocen a más de algún amigo o familiar de nombre Samuel, David, Rebeca, Esther, etc.
Hace poco tiempo, el Congreso de la República de Guatemala, condecoraba en un acto emotivo la bandera de Israel, sin embargo y muy recientemente se daba en Ginebra, Suiza, la Segunda Conferencia de Naciones Unidas contra el Racismo, Durban II, un evento que concluyó muy mal, luego de que el presidente de Irán, Mahmoud Ahmadineyad, tomara el podio, pronunciara un discurso donde expresara que “el sionismo mundial personifica al racismo” y dijo que las potencias occidentales le han dado “mano libre para continuar con sus crímenes”.
Lo que prometía ser una conferencia que lograría acuerdos para combatir el racismo y la xenofobia, se convirtió en un evento que le dio lugar a la intolerancia y el odio. Países como Estados Unidos, Israel, Italia, Holanda, Australia, Canadá, Nueva Zelanda, Alemania (envió observador) y Polonia decidieron no asistir a dicho evento, mientras que la mayoría de países de Europa, como Alemania, Francia, España, Grecia, Países Bajos, Italia, entre otros, se retiraron durante el discurso del Presidente Iraní.
En el plano multilateral, muchos países se encuentran buscando un lugar importante en el seno de la Organización de las Naciones Unidas, y desde ya la carrera para conseguir puestos importantes en los distintos consejos que forman las Naciones Unidas ha iniciado, incluyendo el mismo Consejo de Seguridad, al cual Guatemala aspira. Pero hoy, como hace 61 años, Guatemala tendrá de nuevo la oportunidad en el plano diplomático, de apelar a los principios y valores que representan el sentir de un pueblo noble y bien intencionado, que recibe e integra tanto a judíos como a palestinos, árabes, europeos y africanos, a estadounidenses, sudamericanos, chinos, coreanos, japoneses, etc.
Hoy Estados Unidos, nuevamente se encuentra haciendo un esfuerzo por la paz en la región, tal y como se ha observado luego de las visitas oficiales a Israel, del Presidente estadounidense Barak Obama y de la Secretaria de Estado, Hillary Clinton. Una vez más las crisis internacionales requieren que los países tomen partido por las causas más nobles, hoy los guatemaltecos esperan lo mismo.
Podemos aprender de un país, que en medio de guerras, persecuciones, inmigraciones masivas (sólo en el período de 1990 a 1996, habrían llegado a Israel más de 700,000 judíos provenientes de la antigua Unión Soviética), presiones internacionales, ha sabido salir adelante. Actualmente, Guatemalaenfrenta una crisis no tan distante y lejana como la que ha vivido Israel, con las masivas deportaciones de inmigrantes guatemaltecos, la polarización social, la pobreza, una violencia incontenible, el desempleo y una crisis de valores e identidad. Guatemala puede y debe levantarse, ya lo ha hecho antes, luego del terremoto de 1976, el Huracán Mitch, etc. Pero, Finalmente, me permito extender a la comunidad israelí y judía en Guatemala, un reconocimiento por estos 61 años, y muy especialmente al Señor Embajador de Israel, Isaac Bachman, cuando está por terminar su misión en Guatemala, luego de 3 años al frente de su sede diplomática en este país.
israel y guatemala ¿por qué debemos los guatemaltecos esperar catástrofes y calamidades para unirnos y tendernos la mano?
Por: Lic. Rodrigo Colmenares