Por: Miguel Morales-Chan | Director del Área de Educación Digital en Universidad Galileo
La inteligencia artificial (IA) se ha consolidado como una herramienta estratégica que revoluciona sectores productivos y potencia la competitividad de las empresas. En Guatemala, su adopción permite a líderes empresariales, gremiales y actores del sector productivo mejorar la eficiencia, optimizar procesos y anticiparse a los cambios del mercado, marcando el camino hacia una transformación digital sostenible.
El recorrido para integrar la IA en las organizaciones puede visualizarse como una pirámide de implementación, compuesta por tres fases: exploración, optimización e innovación. En la Fase 1: Explora y Experimenta con IA, las empresas inician con proyectos piloto y pruebas de concepto. Es fundamental definir objetivos claros, identificar problemas específicos que la IA puede resolver y seleccionar áreas de bajo riesgo, como la automatización de tareas rutinarias o la mejora en el servicio al cliente. Un ejemplo internacional es Sephora, que implementó un chatbot capaz de resolver el 60% de las consultas, mejorando la experiencia del cliente y reduciendo los tiempos de respuesta.
Una vez validados los proyectos piloto, se pasa a la Fase 2: Optimiza Procesos y Escala. En este nivel, se integran soluciones de IA a mayor escala para transformar procesos clave. La centralización y estructuración de datos resulta esencial para maximizar la precisión de las herramientas inteligentes. Empresas como Amazon utilizan la IA para predecir la demanda de productos, optimizando su gestión de inventarios y reduciendo costos operativos. Este enfoque permite liberar recursos y tiempo, destinándolos a tareas estratégicas y de mayor valor.
Finalmente, en la Fase 3: Innova y Lidera la Disrupción, las compañías desarrollan tecnologías propias, generando innovaciones que redefinen sus sectores.
Fomentar una cultura de innovación e invertir en talento especializado son pasos cruciales para crear soluciones disruptivas».
Un caso emblemático es Tesla, que ha revolucionado la industria automotriz con su sistema de conducción autónoma basado en redes neuronales, marcando nuevos estándares en tecnología y experiencia del usuario.
Para avanzar en esta pirámide de implementación, es vital contar con una estrategia clara y coordinada entre los distintos departamentos. La integración de la IA no solo optimiza procesos internos, sino que también impulsa el crecimiento y la transformación digital de la economía guatemalteca.