Es uno de los productos que más impacta en la cifra de pérdida estimada de recaudación de impuestos.
De acuerdo al estudio presentado por KPMG el consumo de cigarrillos ilegales en Guatemala incrementó del 23% en 2016 al 31.3% en 2018, representando una pérdida estimada de recaudación de impuestos de Q218 millones.
Según estimaciones proporcionadas por Central American Business Intelligence (CABI) y presentadas por Cámara de Industria de Guatemala (CIG), el Estado deja de percibir Q1 mil millones anuales en materia de impuestos. Uno de los productos que más impacta este número, corresponde a los cigarrillos, de los cuales el 76% son originados en Corea del Sur, siendo PINE y ESSE las principales marcas de contrabando consumidas en el país. Estas marcas son fácilmente diferenciadas de los productos legales, dado que las cajetillas no contienen las advertencias de salud establecidas por las autoridades.
“El contrabando, más que un problema de economía, se vuelve un problema de país que afecta a toda la población”, indicó Javier Zepeda, director ejecutivo de Cámara de Industria. “Este tipo de productos no cumple con ninguna regulación, lo que pone en peligro la salud de los consumidores. Al final, el contrabando es un falso ahorro que solo deja consecuencias negativas para quien consume y para quien lo comercializa”, agregó.
Actualmente Cámara de Industria en colaboración con las Cámaras de Medios, tiene activa una campaña, en la que busca concientizar a los guatemaltecos sobre los efectos en cadena provocados por la pérdida de recaudación de impuestos que genera la compra de estos productos.