Salud, para mejorar la calidad de vida
La relación entre la salud humana y el impacto en su productividad es un hecho que se pierde en su cotidianidad. Sin embargo, las enfermedades, desde una gripe hasta un cáncer, son factores que afectan un país a nivel social y económico.
Tal es la importancia de la salud humana que el Foro Económico Mundial (WEF, por sus siglas en inglés) mide, entre otros aspectos, esta área para elaborar su Reporte de Competitividad Global.
La organización explica que “la mala salud lleva a costos significativos para las empresas, ya que los trabajadores enfermos a menudo están ausentes u operan con niveles de eficiencia más bajos. La inversión en la prestación de servicios de salud es, por lo tanto, crítica para claras consideraciones económicas, así como morales.”
Este reporte, en su edición para 2016 y 2017, clasifica a Guatemala en el puesto 107 de 138 países en su pilar de Salud y Educación Primaria. En una calificación de 1 a 7 (menor a mayor), el país ostenta un 5, especialmente por bajas calificaciones en cuatro categorías de salud: casos de tuberculosis, prevalencia de VI H en adultos, expectativade vida y mortalidad infantil, ydos de educación: calidad de educación primaria y su tasa de inscripción.
A nivel latinoamericano y caribeño, Costa Rica lidera este indicador con 6.2 puntos, que lo coloca en la posición 35 a nivel mundial. Sus calificaciones por categoría no superan el puesto 60, que corresponde a la prevalencia de VIH en la población adulta. Guatemala al canza el 85 en esta clasificación.
El esfuerzo público
Para revertir esta situación, que se refleja en indicadores pero que se vive diariame nteen la realidad, del 75% de los guatemaltecos usuarios del servicio público de salud, el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) implementa una política de salud, con cuatro ejes: democratización de la gobernanza, acceso universal a una atención integral e incluyente, fortalecimiento institucional y gestión transparente.
Entre sus objetivos principales está recuperar el funcionamiento óptimo de la red institucional de servicios de salud, aumentar la eficiencia y sostenibilidad de la inversión pública en salud e implementar el Modelo Incluyente de Salud (MIS).
El MIS fomenta la atención integral e incluyente en prevención, promoción, curación, rehabilitación y cuidados paliativos según los ciclos de vida de los pacientes. Su implementación consta de cuatro fases: ordenamiento territorial, preparación de condiciones, acercamiento a la comunidad e implementación de programas con sistemas de vigilancia e información.
En 2017, este modelo se realiza con una inversión de Q408,285,190.17 en 141 municipios de 9 Direcciones de Áreas de Salud (DAS): Huehuetenango (34 municipios), San Marcos (30), Quiché (20), Alta Verapaz (19), Chiquimula (11), Sololá (10), Totonicapán (10), Ixcán (4) y el área Ixil (3). Los avances de su implementación incluye 1,440 personas capacitadas con un programa descentralizado de formación de Auxiliares de Enfermería en Alta Verapaz, Huehuetenango, Quiché, Totonicapán y San Marcos.También, 7,715 trabajadores del MSPAS preparados para para aplicar y desarrollar el MIS con un diplomado, y otros programas de educación.
Este proyecto cubre parte de los primeros dos ejes de la política de salud liderada por la Ministra Ana Lucrecia Hernández Mack. Para el fortalecimiento institucional y la gestión transparente, al menos en las compras y contrataciones de medicinas e insumos médico quirúrgicos, el MSPAS cuenta con el refuerzo del sector productivo guatemalteco.
El apoyo privado
La lógica del sector productivo para prestar una asistencia técnica al MSPAS recae en fundamentos morales y económicos. Los primeros son obvios, porque al prestar atención médica se mejora la calidad de vida de los guatemaltecos más necesitados, y los segundos, se basan en la inversión directa para elevar la productividad y los ingresos.
Carmen Salguero, de Mejoremos Guate, explica que a partir del estudio de la empresa consultora Dalberg Global Development Advisors en 2011, se identificaron los temas prioritarios para impulsar el desarrollo nacional: erradicar la desnutrición crónica infantil, aumentar la calidad educativa, reducir la tasa de homicidios y fortalecer la institucionalidad para que impere un Estado de Derecho.
En mayo de 2016, para mitigar una crisis históri cade desabastecimiento de medicinas e insumos médico quirúrgicos en siete hospitales, los Ministerios de Finanzas Públicas y de Salud, la Fundación para el Desarrollo de Guatemala (Fundesa), Counterpart y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) firmaron un compromiso para mejorar las compras e inventarios de estos productos.
En este, los empresarios ofrecieron US$400,000 para el desarrollo de herramientas estocásticas y de transparencia. Mientras Counterpart y USAID aportaron US$90,000. “Este es un acompañamiento técnico innovador y único en Guatemala” para apoyar la eficiencia de la gestión pública de parte del sector productivo, en un área específica del MSPAS. Su apoyo no influye en el pago de nóminas, infraestructura, contrataciones, elección de proveedores y otras áreas que cubre el presupuesto de la institución.
El MSPAS es dueño de las herramientas a implementar en los hospitales públicos: Roosevelt, General San Juan de Dios, Regional de Occidente, Escuintla, Cobán, Antigua y Zacapa.
En el primer diagnóstico de procesos de compra y contratación de medicamentos e insumos médico quirúrgicos, Mejoremos Guate se encontró con un sistema obsoleto de inventario sin categorías para conocer qué medicamentos son de alta rotación y cuándo o a qué precio debería comprarse.
Entonces, la alianza público privada creó un algoritmo, que no se podrá modificar o manipular por los usuarios, para orientar la compra y manejo de inventarios de las medicinas e insumos médico quirúrgicos. Cuando las provisiones lleguen a un punto, el sistema levantará una alerta para que las Entrevista autoridades inicien los procesos de compra y contratación y aseguren el abastecimiento de medicina.
También se desarrolló una herramienta que avisa cuando seplantea una compra innecesaria o con características atípicas, que no podrá ignorarse.
La implementación de esta tecnología proyecta un ahorro en compras de hasta Q70 millones en 2017. Esto implica que el MSPAS podría invertir la millonaria cantidad en otros rubros críticos como infraestructura e higiene de instalaciones.
Con estas acciones tanto públicas como empresariales, se busca enfrentar directamente la corrupción en el Estado, promover la calidad del gasto público, fortalecer la institucionalidad del MSPAS y cumplir con el fin último de todos los involucrados, asegurar servicios de salud de alta calidad para todos los guatemaltecos.
Posición de Guatemala en Salud y Educación (de 138): 74: 57 casos de tuberculosis por cada 100,000 habitantes 85: 0.5% de prevalencia de VIH en la población adulta 88: 71.7 años de expectativa de vida 97: 24.3 muertes infantiles de cada mil nacidos vivos 117: 86.4% de inscripción en educación primaria 130: 2.5 puntos de 7 en calidad de educación primaria.