La comunicación asertiva es ese elemento fundamental que durante décadas ha ocupado a especialistas, para desarrollar mejores resultados en la forma de expresar lo que se piensa y siente dentro de las relaciones laborales.
Esa frase popular “no es lo que se dice… sino también cómo se dice”, es parte de lo que expertos han definido como la comunicación asertiva. Cada mensaje va acompañado de miradas, gestos corporales, tono de vos y actitud, asegura Christian Estrada, psicólogo.
El estilo de comunicarse en las relaciones interpersonales puede variar. Algunas formas no adecuadas han sido identificadas, comenta Estrada. “La comunicación evasiva-ansiosa, es cuando las personas se comportan de manera pasiva. Generalmente permiten que violen sus derechos, suelen declinar sus objetivos, se sienten frustrados, infelices y ansiosos”, señala el experto.
Estrada explica que muchas personas que se muestran inhibidas y retraídas permiten que los demás decidan por ellas. Todo lo contrario ocurre cuando las respuestas suelen ser agresivas. “Las personas violan los derechos de los demás, logran objetivos a costa de los demás, son beligerantes, humillan y desprecian, son hostiles y se meten en las cosas que no les competen”, puntualizó.
Sin embargo, cuando la respuesta es asertiva las personas protegen sus derechos y respetan los de los demás, logran sus objetivos sin detrimento de los otros y “se sienten en confianza, sociables y emocionalmente expresivos”, complementa Estrada.
Algunas habilidades que se deben practicar:
- Defender sus derechos y respetar los de los demás.
- Cumplir obligaciones ante los superiores y los iguales.
- Encontrar la forma adecuada para pedir favores, decir “cumplidos” o dar una queja.
- Solicitar cambio de conducta a otras personas.
- Manejar la comunicación no verbal.
- Iniciar una plática para interactuar en grupo y con personas de estatus diferentes.
- Diferenciar una discusión de una negociación.
- Tomar decisiones.
Rompe la rutina y juégale la vuelta al estrés
Para evitar el estrés, Revista Industria y Negocios te comparte algunos ejercicios para realizar en la oficina; solo necesitas de una silla, escritorio y de algún colega.
- Hombros y nuca
Cruza las manos detrás de la cabeza y presiónala contra ella, sin que cedan. (La nuca permanece estirada).Baja la cabeza hasta el pecho y refuerza ligeramente la inclinación por el peso de tus manos.Duración: tres respiraciones completas, lentamente. - Movimiento de la cabeza
Con tu espalda erguida y con los ojos cerrados con el cuello estirado, gira la cabeza de izquierda a derecha, pasando por el pecho. - Piernas
Sentado en la silla, estira las piernas, sube y baja las puntas de los pies con energía.Debes iniciar el ejercicio con lentitud y aumentar paulatinamente la velocidad. - Espalda
Sentado en la silla, inclina tu cuerpo hacia delante e intenta estar relajado. Lleva tus manos sobre la cabeza y por el peso se estirará la espalda.
Cruza las manos por detrás de la espalda y al inclinarte hacia adelante avanza con los brazos tanto como puedas; con ello podrás estirar la zona del hombro y pecho. - Brazos
Levanta los brazos, como si quisieras alcanzar algo. Tira con una mano de la otra.
Flexiona los codos y tomarse de las manos frente a los hombros; tirar para contraer los omóplatos a la vez.
Cruza las manos y extiende los brazos frente a tu rostro.
Apoya tu brazo derechos en el escritorio y palpa diferentes puntos tensos con tu mano izquierda; masajéalo durante unos minutos presionando ligeramente. Después cambia de lado.