La aprobación de una normativa de ley para aplicar castigos más severos contra quienes ingresen mercancías de contrabando, es otra urgente necesidad para el país. Aunque hubo avances en los primeros dos años del actual Gobierno, vía la Comisión Nacional Contra el Contrabando, los niveles de este ilícito siguen siendo elevados, ocasionando graves daños en las empresas formales del país que pagan sus impuestos, en la salud de los consumidores, en el Estado de Derecho y en el Fisco. Estimaciones de la Superintendencia han revelado que anualmente el erario público deja de percibir unos Q6 mil millones en impuestos, producto del contrabando. Productos como abarrotes, cigarrillos, licores y gasolina, son los principales que ingresan de manera ilegal al país.