El agua calentada con radiación solar se puede utilizar en aplicaciones domésticas e industriales. Las temperaturas alcanzadas pueden oscilar entre 70 y 80 grados centígrados, dependiendo de la cantidad requerida del rendimiento del colector
POR ING. RENÉ SILVA | Técnico en Procesos del CGP+L.
La energía solar es obtenida mediante la captación de la radiación del sol. Esta radiación puede ser utilizada para varios propósitos, entre ellos, el calentamiento de agua. El aprovechamiento de esta energía es posible, incluso, en días nublados ya que se aprovecha igualmente la luz directa del sol, como el espectro infrarrojo.
El agua calentada con radiación solar puede ser utilizada en aplicaciones domésticas e industriales. Las temperaturas alcanzadas pueden oscilar entre 70 y 80 grados centígrados, dependiendo de la cantidad requerida y del rendimiento del colector. El rendimiento del colector está en función de la temperatura del agua (ingreso y egreso), la temperatura ambiente y la intensidad de radiación solar en el área donde se ubique la vivienda.
Las temperaturas alcanzadas por los calentadores son suficientes. Por ejemplo, para un baño, en promedio, se necesitan temperaturas menores de 40 grados centígrados, por lo que el calentamiento solar puede suplir estos requerimientos en sistemas dimensionados.
En la industria, las aplicaciones pueden variar desde calefacción para la crianza de animales hasta el precalentamiento de fluidos para infinidad de procesos. En Guatemala existen empresas que han empezado a utilizar energía solar para desarrollar sus procesos productivos o, bien, el préstamo de sus servicios, como es el caso del Club Campestre La Montaña, que ha instalado una serie de 30 paneles solares para el precalentamiento de las aguas utilizadas en saunas, duchas y jacuzzis, cambio que le ha permitido una reducción en el consumo de energía de hasta 180 mil kilovatios al mes. La inversión es de aproximadamente Q800 mil, con planes de recuperación de dos años, basado en los ahorros actuales. Esta implementación impacta directamente al ambiente con la reducción del consumo de energía eléctrica, disminuyendo así la liberación de 19 toneladas de dióxido de carbono.