Discurso pronunciado por Andrés Castillo Calderón, nuevo presidente de CIG, en la asamblea de toma de posesión.
Quiero empezar agradeciendo a todas las personas que han depositado la confianza en mí, en especial a los ex presidentes Tommy y Juan Antonio por su paciencia, enseñanzas y ejemplo durante los años que yo llevo aquí en Cámara de Industria. En ellos he visto proyectarse un gran liderazgo, y aunque siendo muy diferentes, cada uno ha sido capaz de interpretar las necesidades y retos para tomar decisiones efectivas para el sector y para el país.
Y es que uno se pregunta: ¿Qué es lo que hace que los pilares de una nación sean altos y sus cimientos fuertes? ¿Qué es lo que hace que una nación sea poderosa y se atreva a desafiar a los enemigos que lo asolan? Son hombres fuertes y valientes, los grandes hombres quienes las hacen poderosas, los que trabajan mientras otros duermen. Ellos son los que construyen los pilares de una nación y los levantan hacia los cielos.
Esos hombres han estado aquí. Hace aproximadamente 50 años que un grupo de empresarios industriales decide comprometerse con la construcción de una mejor Guatemala y con su industria, orientados a promover el desarrollo y mejoramiento del sector y de la sociedad. Estos guatemaltecos sabían que para lograr de forma exitosa el desarrollo de un país, se necesitaba de una fuerza organizada para apuntalar la generación de riqueza y la creación de fuentes de empleo, con políticas de fomento a la inversión y la competitividad.
Y es así, como comienza este proyecto. Una batalla con grandes retos y obstáculos, que era necesario enfrentar para el bienestar de nuestro país. Los obstáculos se fueron venciendo y con el tiempo se fueron alcanzando objetivos alentadores, que permitieron construir una institución sólida y reconocida, generando cambios positivos en Guatemala.
El compromiso que un día ese grupo de industriales realizó, ha continuado consolidándose y ha dado muchos frutos. Quienes hoy estamos aquí hemos sido testigos y protagonistas de esta historia de éxito. Esto nos pone una gran responsabilidad encima. Debemos mantener y fortalecer a una institución que ha contribuido de manera trascendental con nuestro país.
Hoy vemos con preocupación una Guatemala desesperada y triste, donde la inseguridad y el crimen se pasean por las calles a su antojo, con total impunidad. Hoy vemos un país donde las personas deben llevar sus propias medicinas e insumos a los hospitales para ser atendidos. Las finanzas nacionales nunca habían estado tan debilitadas, y nuestro país tan endeudado. Vemos una Guatemala en la que puentes y carreteras se destruyen con tan solo un par de aguaceros.
En los últimos cuatro años se han perdido alrededor de 300 mil plazas de trabajo. La informalidad se instala y el contrabando florece. Cada día escucho a gente comentar, “nunca habíamos estado tan mal, ahora sí tocamos fondo”, y la realidad es que vengo oyendo esas frases desde hace ya un par de años, y pareciera como si el fondo cada vez se hace más profundo.
Y mi pregunta es: “a dónde vamos a llegar”, o mejor dicho “hasta dónde nos vamos a permitir llegar”. Cámara de Industria ha logrado penetrar en las esferas de la sociedad y ha ganado un espacio muy importante como generador de cambios positivos. Con el mismo empuje que nos ha caracterizado, hoy les pido que nos comprometamos. Con este equipo de trabajo que me toca coordinar, unamos fuerzas y sigamos jugando el papel que nos corresponde. No podemos esperar.
Debemos interpretar adecuadamente la coyuntura nacional y enfrentar los desafíos con fuerza y decisión. Esta institución tiene la capacidad para presionar, articular y proponer todo lo que nuestro sector exige en tiempos tan difíciles como los que hoy nos toca vivir. Hoy, junto al resto de directores y equipo de Cámara de Industria, sabré asumir esta enorme responsabilidad. Con la inspiración de mis antecesores y la convicción de nuestros principios y valores, estoy seguro que enfrentaremos con éxito estos desafíos. Agradezco la oportunidad que hoy me otorgan. Gracias por la confianza y gracias por el compromiso, les pido su acompañamiento y les ofrezco mi entrega.
Muchas gracias.
Andrés Castillo Calderón
Presidente de Junta Directiva de CIG