“Todas las aguas son bienes de dominio público, inalienables e imprescriptibles. Su aprovechamiento, uso y goce, se otorgan en la forma establecida por la ley, de acuerdo con el interés social. Una ley específica regulará esta materia”. No obstante lo anterior, y a pesar de los esfuerzos realizados durante más de tres décadas, la legislación correspondiente aún no ha sido emitida por el Congreso de la República.
POR ING. KHALIL DE LEÓN
Tomando en cuenta que el tema hídrico es transcendental para la productividad y sostenibilidad del sector industrial, y que desde hace 20 años, el 22 de marzo, se conmemora el “Día Mundial del Agua”, se comparten algunas consideraciones al respecto.
Importancia del recurso hídrico
El agua es una sustancia esencial para la vida en el planeta, ya que es constituyente de todos los organismos vivos y aparece en los compuestos naturales. Es tanta su relevancia que la Asamblea General de las Naciones Unidas, en 2010, reconoció explícitamente el derecho humano al agua y al saneamiento.
Para las industrias, es el solvente por excelencia y parte de un sinnúmero de procesos. Para una gestión empresarial ambientalmente amigable de este recurso es necesario abordar, entre otras cuestiones, la disminución de su consumo, la utilización eficiente, el manejo sostenible de las fuentes de abastecimiento, ya sean estas subterráneas, superficiales o de lluvia.
Marco legal
En Guatemala, la Constitución Política de la República establece, en su Artículo 127 que: “Todas las aguas son bienes de dominio público, inalienables e imprescriptibles. Su aprovechamiento, uso y goce, se otorgan en la forma establecida por la ley, de acuerdo con el interés social. Una ley específica regulará esta materia”. No obstante lo anterior, y a pesar de los esfuerzos realizados durante más de tres décadas, la legislación correspondiente aún no ha sido emitida por el Congreso de la República.
Buenas prácticas
A continuación se comparten sugerencias que pueden ser de utilidad para mejorar el desempeño ambiental de su compañía:
- Desarrollo de un plan de gestión de aguas industriales, que incluya tanto aquellas que se utilizan en la producción como las residuales. En el caso de las últimas, es importante recordar que su manejo y tratamiento ha estado normado mediante el Acuerdo Gubernativo número 236-2006, que tiene aplicación en todo el territorio nacional y conlleva distintas obligaciones para los entes generadores de las mismas. Para mayor información, puede visitar: www.marn.gob.gt.
- Implementación de sistemas de medición de las cantidades de agua que requiere cada etapa del proceso productivo.
- Evaluación de equipo, maquinaria e infraestructura en general, para iniciar la sustitución y modernización de sus componentes.
- Adopción de medidas y tecnologías para disminuir los patrones de consumo hídrico.
- Análisis de opciones de reutilización del agua, dependiendo de la calidad de la misma, en el proceso productivo o bien en otras aplicaciones, como el riego de áreas de jardín.
- Servicio de limpieza y mantenimiento de los sistemas de abastecimiento y tratamiento, con el propósito de garantizar su adecuado funcionamiento, como una rutina permanente en el marco de la estrategia de trabajo.
- Estimular la innovación en la búsqueda y ejecución de las mejores prácticas posibles para la optimización del manejo interno de aguas, a efecto de contribuir a aumentar la competitividad de la empresa.