Al igual que las exportaciones, las importaciones en los distintos países centroamericanos también han visto una reducción en su tendencia. Aunque Costa Rica, Honduras y Nicaragua todavía vieron un repunte en el año 2008, la tendencia se ha ajustado a inicios de este año. Por su lado, Guatemala es el país que ha visto el deterioro más acelerado, apenas hace dos años estaba creciendo a un 14% y ya para inicios del año 2009 está en 4.5%. En muchos casos, la caída se puede explicar por una reducción en el nivel de precios del petróleo. A mediados del año pasado, el alza histórica del petróleo y sus derivados tuvo un fuerte impacto en la factura de importación de la región, que es importador neto de dicho carburante. En la medida que los precios se han estabilizado, la factura de importación también se redujo.
Sin embargo, la caída en importaciones no se puede atribuir únicamente a un efecto precio. La región no ha estado inmune a la crisis económica-financiera global y los mercados internos se han contraído como consecuencia de la caída en el consumo local. Por lo que también se ha apreciado una caída en los volúmenes de importación, tanto bienes de consumo como materias primas y bienes de capital.