En julio del presente año, el Director General de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Roberto Azevêdo, anunció que 14 miembros de la estructura, entre estos Australia, Canadá, China, Costa Rica, Estados Unidos de América, Hong Kong, Japón, Noruega, Nueva Zelanda, República de Corea, Singapur, Suiza, China y Unión Europea, han negociado la conformación de un Acuerdo sobre Bienes Ambientales (ABA).
Es necesario recordar que el reconocimiento de la vinculación entre comercio y ambiente se ha dado desde la década de los setenta, habiéndose incluido la declaración de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Humano, celebrada en Estocolmo, Suecia (1972); así como en distintos tratados internacionales, como la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (1973) y el Convenio sobre la Diversidad Biológica (1992).
Posteriormente en el 2001, en la Cuarta Conferencia Ministerial de la OMC realizada en Doha, Qatar, se presentó la primera Ronda de Negociaciones Multilaterales, en la que se incluyó la temática medioambiental. No obstante, el avance ha sido lento debido a problemas como la definición de qué productos califican como bienes ambientales, la construcción de listados correspondientes y la convocatoria a los países no industrializados. En tal sentido, dichos bienes se refieren a un conjunto de tecnologías especializadas que pueden contribuir al mejoramiento del ambiente y la utilización responsable de los recursos naturales. Como parte de estas, se pueden citar paneles solares, turbinas, medidores de calidad de aire, equipos para potabilización del agua, sistemas de tratamiento de aguas residuales, manejo de residuos y desechos sólidos.
Los beneficios inherentes al entrar en vigencia el ABA, sería la eliminación arancelaria para tales tecnologías. Un ejemplo, es el compromiso adquirido por los países del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC, por sus siglas en inglés) de reducir los aranceles al cinco por ciento para el año 2015, aplicables a un listado de 54 productos.
Para Guatemala la entrada en vigencia del ABA, coadyuvará al Desarrollo Sostenible de la nación, mediante la adquisición de los equipos relacionados al mejoramiento ambiental a mejores precios, así como la consecuente generación de empleos para la instalación, operación y mantenimiento de los mismos.
Al sector industrial, en particular, le permitirá incrementar su productividad y competitividad, mediante la mejora continua en sus procesos, productos y servicios, a través de la implementación de estrategias de gestión proactivas, en favor de la población, en el marco del pleno respeto al ambiente.
TEXTO: Ing. Khalil de León